Un acuario bien logrado se convierte en un pequeño e impresionante nicho del mundo submarino. Es una muestra de la naturaleza que resulta no sólo decorativo sino fascinante y que puede llenar de vida y color a nuestro hogar.
Sin embargo, cuando decidimos adentrarnos por primera vez a este maravilloso mundo, siempre surgen preguntas:
¿Qué acuario debo comprar? ¿Debe ser una pecera chica o una pecera grande? ¿Cuántos peces puedo tener?
Eso sin mencionar las dudas que nos puedan surgir en cuanto a equipo, condiciones del agua y cuidados de las especies que queremos mantener en nuestro tanque, su alimentación y su compatibilidad.
Pues bien, en esta serie de artículos titulada Primer acuario, iremos revisando paso a paso y tema por tema, el camino que hay que seguir para poder llevar a cabo con éxito la puesta de un acuario y así poder disfrutarlo sin descalabros.
Para los acuaristas experimentados, el primer paso a seguir, sería escoger al protagonista del tanque, es decir, la especie del pez principal que queremos mantener en el acuario. A partir de ahí se podría partir con el diseño de la pecera, su tamaño, equipo necesario, especies compatibles, entre otras.
Sin embargo, cuando se es un acuarista novel, resulta difícil tener el camino tan claro. Así que comenzaremos con lo más esencial: El tamaño del tanque.
Aunque inicialmente el primer factor a tomar en cuanta es el espacio con que disponemos para colocar el acuario, hay algo más a tener en cuenta a este respecto.
Si bien lo lógico podría parecer que es mejor empezar con tanques pequeños, 40 o 60 litros por ejemplo; la verdad es que mientras más grande la pecera mejor para empezar. Es mucho más sencillo manejar y mantener un acuario grande que uno pequeño. Esto básicamente se debe a que mantener el equilibrio biológico del agua y las condiciones químicas que se derivan de éste, resulta más sencillo en un tanque de grandes dimensiones. Y claro, los peces se desenvuelven mejor. Pero de eso hablaremos más adelante.
Así que para empezar, diremos que lo idóneo sería una pecera de entre 80 litros como mínimo y 120 litros.
Una vez hecho esto, podemos pasar al siguiente paso. La ubicación y colocación del tanque.
Hasta el siguiente Articulo
Saludos
Alonso Cortés
Sin embargo, cuando decidimos adentrarnos por primera vez a este maravilloso mundo, siempre surgen preguntas:
¿Qué acuario debo comprar? ¿Debe ser una pecera chica o una pecera grande? ¿Cuántos peces puedo tener?
Eso sin mencionar las dudas que nos puedan surgir en cuanto a equipo, condiciones del agua y cuidados de las especies que queremos mantener en nuestro tanque, su alimentación y su compatibilidad.
Pues bien, en esta serie de artículos titulada Primer acuario, iremos revisando paso a paso y tema por tema, el camino que hay que seguir para poder llevar a cabo con éxito la puesta de un acuario y así poder disfrutarlo sin descalabros.
Para los acuaristas experimentados, el primer paso a seguir, sería escoger al protagonista del tanque, es decir, la especie del pez principal que queremos mantener en el acuario. A partir de ahí se podría partir con el diseño de la pecera, su tamaño, equipo necesario, especies compatibles, entre otras.
Sin embargo, cuando se es un acuarista novel, resulta difícil tener el camino tan claro. Así que comenzaremos con lo más esencial: El tamaño del tanque.
Aunque inicialmente el primer factor a tomar en cuanta es el espacio con que disponemos para colocar el acuario, hay algo más a tener en cuenta a este respecto.
Si bien lo lógico podría parecer que es mejor empezar con tanques pequeños, 40 o 60 litros por ejemplo; la verdad es que mientras más grande la pecera mejor para empezar. Es mucho más sencillo manejar y mantener un acuario grande que uno pequeño. Esto básicamente se debe a que mantener el equilibrio biológico del agua y las condiciones químicas que se derivan de éste, resulta más sencillo en un tanque de grandes dimensiones. Y claro, los peces se desenvuelven mejor. Pero de eso hablaremos más adelante.
Así que para empezar, diremos que lo idóneo sería una pecera de entre 80 litros como mínimo y 120 litros.
Una vez hecho esto, podemos pasar al siguiente paso. La ubicación y colocación del tanque.
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